martes, 22 de febrero de 2011

Morir a los 27 - Joseph Gelinek

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Reseña - por Pilar Alonso. Publicada originalmente en www.ciberanika.com

Plaza&Janés, Octubre 2010
Género: Novela
512 páginas

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Alguien ha disparado a John Winston, líder del grupo The Walrus, la banda de rock más importante del momento. Con él parece cumplirse la maldición de músicos famosos fallecidos a la edad de 27 años: Jim Morrison, Janis Joplin, Jimi Hendrix, Kurt Cobain…

El inspector Raúl Perdomo será el encargado de investigar su asesinato, pero la tarea se complica cuando Mark David Chapman, el asesino de John Lennon, que aún permanece en prisión, se confiesa autor del crimen.
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En sus dos novelas anteriores, La décima sinfonía y El violín del diablo, Joseph Gelinek demostraba su gran conocimiento de la música clásica. En esta ocasión, le toca el turno a algo tan moderno como el rock, y se defiende igual de bien.

El protagonista es el mismo que en sus anteriores entregas: Raúl Perdomo, ahora ascendido a inspector, y su historia personal continúa desarrollándose al margen del caso que le toque investigar. Esa continuidad, ese reencontrarse con un personaje al que ya le habíamos tomado cariño, contribuye a hacer más atractiva si cabe esta novela.

Porque lo cierto es que cuenta con ingredientes muy interesantes, siendo los más relevantes los que tienen que ver con la historia de la música moderna o con las maldiciones y leyendas asociadas a ella. De hecho, la novela se inicia con la escena del asesinato de Lennon, cuyo significado para la trama no tarda en ser desvelado.

Cada capítulo lleva el título de una canción y al final del libro hay una relación de todas ellas que sirve como guía para confeccionar la banda sonora de esta historia. Todas ellas han sido elegidas con gran acierto y revelan el mimo que el autor ha dedicado a su obra.

Anécdotas y curiosidades sobre la música moderna se alternan con el desarrollo de una investigación que toca temas como las mafias del Este o la piratería, y el personaje de Raúl Perdomo vuelve a brillar en una trama bien construida y muy amena.

Joseph Gelinek ha vuelto a dotar a su thriller de esa originalidad que ya le caracteriza, jugando con la música como con un personaje más de la historia. El resultado es una novela absorbente y con mucho ritmo que se lee sin respiro.
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viernes, 11 de febrero de 2011

El esclavo de Al-Hamra - Blas Malo

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Reseña - por Pilar Alonso. Publicada originalmente en www.ciberanika.com

Ediciones B, Octubre 2010
Género: Novela
472 páginas


Al-Ándalus. En Madinat Garnata, año 748 de la Hégira. Ibn Zamrak, político, poeta y visir de Muhammad V, mantiene el precario equilibrio del último reino musulmán de Occidente, acosado por los reinos cristianos en el Norte y por el reino de los meriníes en el Sur, mientras compone los versos que embellecerán los muros del nuevo palacio de Al-Hamrā.

Su pasado alberga un secreto al otro lado del mar y, para mantenerlo oculto, no dudará en traicionar a un amigo de su infancia cuyos descendientes, privados de libertad, buscarán venganza.
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Ésta es la primera novela publicada de Blas Malo y hay que decir que su estreno en el mundillo literario es espectacular. Está bien escrita, bien documentada, y la trama resulta sugerente, evocadora y adictiva.

Que un autor novel sea capaz de transmitir con su primera obra todo un mundo de sensaciones es todo un logro. A través de las páginas de Blas Malo el lector se verá trasportado como por arte de magia a la Granada del siglo XIV, al desierto, o a la ciudad de Fez, y disfrutará del olor de las especias, del tacto de los aceites o del gusto de los exquisitos manjares que aderezan toda la historia. Es tal el grado de inmersión en ese universo de los sentidos, que no podrá evitar buscar en la red recetas o condimentos que recreen, siquiera en parte, el mundo que sus palabras han despertado en nosotros.

Pero ése es sólo el envoltorio de una historia que cuenta con muchos alicientes: una trama bien construida, unos personajes creíbles y una magnífica labor documental. Y como hilo conductor la construcción de la Alhambra con todo lujo de detalles, y con algunas curiosidades muy suculentas.

La novela explora el enfrentamiento entre los distintos reinos musulmanes – nazaríes y meriníes – y en menor medida también las relaciones con los cristianos, un tapiz de alianzas y conspiraciones que sirven de sustento a la historia que protagonizan el visir Ibn Zamrak y tres de sus víctimas: Ahmed, esclavo que trabaja en las obras de la Alhambra; Aixa, concubina del sultán; y Abdel, soldado de la frontera. Sus respectivas trayectorias se entrelazan con soltura en el entramado político e histórico del momento, despertando el interés del que se asoma a sus páginas y manteniéndolo a lo largo de toda la trama.

He de comentar también la edición, que lo merece: un prólogo explicando la situación de Granada en aquellos años, glosario de términos, mapa, apéndices, bibliografía… un trabajo bien hecho y bien presentado que contentará al lector más exigente.

No me queda más que felicitar al autor por su estreno literario y por una novela absolutamente cautivadora. Ni que decir tiene que estaremos pendientes de su trayectoria, que augura grandes éxitos.
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